
planificamos cosas elementales como el trabajo pendiente, pero lo que no está pendiente no lo podemos planificar aun cuando permanece latente el hecho de que en algún momento debemos llevarlo a cabo. Nos perdemos en la incertidumbre de lo que está por suceder, vamos acumulando positivos y negativos, que en suma nos arroja saldos de lo que queremos darnos, amarramos los anhelos a las patas de la cama, del escritorio, de una silla o de algún lugar, pensando que así estarán seguros y no nos atrevemos a dejarlos volar libres y a su antojo por temor quizás a que se vayan y no regresen jamás así cuando te dejas llevar por los deseos recopilados en el subconciente mientras que los del conciente esperan pacientemente junto a los mismos anhelos que permanecen "seguros" atados de algo recogiendo cargas y frustraciones que revelan nuestras más desasertadas decisiones.
entre los claros y oscuros pensamientos dejamos entrever cuanto podemos soportar y cuanto estamos dispuestos a soportar mientras que la magia se muestra a través de una cortina semitransparente, tratas de acercarte, sientes que a través de ese velo puedes disfrutar de ella, te entregas a vivir la magia de un momento perfecto y lo único que te preocupa en ese momento es que alguien detenga la fuerza que hace funcionar la magia detrás del velo.
Dejas que la lluvia incesante recorra cada centímetro de tu cuerpo para lavar los malos momentos, te dejas lavar el rostro y la mirada, entregas el alma en una sonrisa limpia, pura, serena, de la mas bonita esencia, de verdades profundas y simplezas divinas, te robas el alma y yo te la cedo. olvidas el mundo y te quedas tan quieta y descubro que esa eres tu, tan quieta y callada y es a quien amo, se elevan las manos, los rostros, se elevan miradas, se vuelven profundas y penetran el cuerpo, y al dejar de llover solo queda el recuerdo, la magia se apaga y el ruido atormenta y vuelves a ser tu que sigues sin saber. cuanto pesa la magia? que tanto puede aclararte la magia? existe parati la magia en algun lugar donde mis pasos no te acompañen? o son nuestros deseos un berrinche caprichoso sin razon de ser de la naturaleza humana que se empeña en hacernos querer lo que no podemos tener? nos apartamos lentamente de la magia, arrastramos nuestros pasos con la mirada fija en los adoquines como buscando, como si alli entre ellos perdimos la ilusión de repetir la magia. solo encontramos que efectivamente la vida se compone de momentos de magia y son estos momentos los que nos mantienen en la idea fija de querer quedarnos para siempre...