A los amores prohibidos, a los no convencionales, a los amores que se vuelven murmullos entre los que se creen perfectos... a los amores que no conocen fronteras, a los que se les opone el mundo y a los que no admiten un no por respuesta...
A todos ellos les invito a explorar los rincones de mi baúl...

22 feb 2011

De bastones y horizontes amplios...

Casi nunca podremos saber en cual punto del camino se encuentra nuestro presente porque los minutos se desmoronan ante nuestros ojos como arena del desierto convirtiéndolos en pasado; nos gastamos la vida corriendo tras los sueños, luchamos con tenacidad y valentía por defender nuestros ideales, sin embargo, hay momentos en que nos nos atrevemos a cruzar la calle por temor a lo que nos encontraremos en la acera de enfrente, preferimos permanecer en nuestra zona de confort y valernos de los argumentos que si se atreven a entrar dentro de nuestro radio de acción, pero, ¿tenemos la capacidad de proyectarnos un poco más afuera con la misma tenacidad? la respuesta es ¡No!, porque  no queremos correr riesgos, si visualizamos la vida un poco mas al horizonte de las cosas probablemente podamos descubrir que existen paisajes, personas, situaciones que antes no habíamos notado. Yo personalmente soy tan corta de vista que ni con anteojos puedo ver los letreros del transporte público y si estoy sola podría tardar mucho en tomar la ruta acertada, para eso tal vez dentro de poco necesitaré un perro y bastón, adminículo muy útil por cierto pero que su uso se ha desvirtuado tanto que la mayoría de las personas lo usan de forma invisible y se acostumbran tanto a usarlo que hasta termina atrofiándose su capacidad de análisis, entendimiento y aprendizaje; En una situación cotidiana en la oficina una compañera me pide ayuda con algo en su computador, yo, que en el momento estoy ocupada le digo que iré en un par de minutos, tarde a lo sumo 1 minuto en acercarme y ella me dice "ya solucioné, gracias" inmediatamente ella empieza a explicarme cual era su problema y como lo había solucionado, yo me limité a decirle -trata de solucionar antes de llamarme cuando tengas un problema, es un buen ejercicio para deshacerte de tu bastón.
Tal vez mi respuesta pudo sonar arrogante, dado que me pide que la ayude a cerca de una docena de veces al día, pero estoy segura que se ampliará su horizonte, tratará de atacar el problema y tal vez hasta se atreva a ver que hay en la acera de enfrente, desarrollará habilidades que ignoraba que tenía y sin saberlo terminará agradeciendo mi arrogancia.
Es así como nos vamos atrofiando y acostumbrándonos a que otros solucionen nuestros problemas, tal vez a mi me guste sentirme hábil solucionando los problemas ajenos pero cuando me convierto en el bastón de alguien pueden suceder dos cosas: 
- Las personas absorben mis conocimientos y mi habilidad, eso me hará sentir muy satisfecha. 
- Las personas terminan completamente atrofiadas, para que aprender si tiene un bastón que soluciona todo?
Tal vez mi corta vista no me permita abordar a tiempo el transporte público pero mi vista interior si que me permite visualizar claramente y con la antelación suficiente lo que está sucediendo a dos calles de aquí.
Creo que solo optaré por el perro, el bastón aun no será necesario.



1 comentario:

Ramón. Mérida Yucatán, Mexico. dijo...

Martita, siempre me he autodefinido como un apasionado de la buena poesía, por eso te aseguro que no tengo empacho para gritarle al mundo entero y si la necesidad, que para mí, tú lo eres todo en la perfección de las letras y la poesía. Tú eres lo mejor de lo mejor. Gracias Martita, gracias por regalarnos tantas cosas bellas, gracias compartir tu mundo extraordinario con nosotros y gracias por existir.
Ramón Escalante. Mérida Yucatán, México.