Estar contigo es como estar conmigo misma en mis mejores momentos, es evocar momentos que parece que nunca han pasado, es revertir los pensamientos, es sucumbir ante el aplastante brillo de los ojos, es entregarse sin remedio al éxtasis de mil instantes convertidos en uno solo. Y una grita ¡basta! y al unísono grita ¡no pares, quiero continuar!. Es la locura concentrada en una sonrisa, son lágrimas caídas por las mejillas pero que nunca llegan a tocar la barbilla. Eres esperanza, vida y mas vida, vida que das y quitas, luz en las sombras de un medio día, añoranzas de futuro, más no de presentes, eres vacío que quiero llenar con un solo respiro. Penetras por mis ojos y te desangras en mi mente, como cuerpo de serpiente, recorriendo todo por dentro. Eres un mensaje sorpresa marcado con neón. Eres húmedo rocío madrugador cuando caminamos descalzas por el prado, frío que entra por la planta de los pies y recorres lentamente cada milímetro del cuerpo hasta estallar en nuestro cerebro y estremecer todo el cuerpo. Eres el columpiar de los deseos en esas sillitas que son para dos.
1 comentario:
Marthita, son tus poesías cual himno universal al amor. todas son muy hermosas y en cada una de ellas me ubico en algún instante de mi vida como si hubieran sido escritas solo para mi. Créeme que las siento mías al igual que tu imagen y tu recuerdo. Ramón
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