Nos hemos entregado al tiempo para preferir morir en segundos en una sola caricia. Ha sido un esfuerzo inútil oponerse, nos arrastra nuestro viento, vendabal de suspiros, imagenes de pasión. Seras mía aunque no estés, seré tuya aunque no esté contigo, me has tatuado la sangre, teñido el alma con la tinta de tu deleite. Con la fuerza de mis piernas te sujetaré a mis caderas, para retenerte porque no soporto la pequeña posibilidad de la lejanía de tu voz. Nos encontramos a la vez, con tu mirada vasta cubres mi piel y mis pensamientos, le quitas las manecillas al reloj..... En mi entrega conoces mis anhelos, mis miedos y mi amor. Mi voz aun te siente y te espera aun antes de que te vayas, reclamando gemirte al oido, para desgastarse con miles de te amo, y adueñarme de tu silencio persuadida por tu placer. Tengo el corazón lleno de adorables aguaceros, incansables, interminables, pero si miro tu cuerpo desnudo recostado, del lienzo de tu espalda sale el sol que calienta y me quema la piel, escampa en mi la sed de ser mujer. Me quedo suspendida en tus palabras, sigo murmurandome tus ecos, vivo hambrienta de tu cuerpo aun despues de haberlo saciado, sigo abrazando tu sombra, sigo gravemente deseando tu deleite quiero tenerte en mi vientre, quiero cubrirme el cuerpo de tu arena, con la languida luz del mismo cuarto, con la humedad en mi, perseguida por el reto de tus manos a saciar mi deleite... nuestro deleite de amarnos.
Para mi amor porque...
Me envicia su mirada, me apasionan sus manos, pierdo la conciencia si me besa, que puedo hacer....
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